Riviera Pharma & Cosmetics GmbH - conocido anteriormente como Robert Schrenk Producción de Productos Químicos y Cosméticos - registró el nombre y el logotipo de "Amargo Sueco Original" (“Original Schwedenbitter”) como marca comercial en 1981. Desde entonces, los amargos gozan de la gran estima de los farmacéuticos y disfrutan de inmensa popularidad entre los clientes. El Amargo Sueco Original de Riviera se elabora a partir de 13 hierbas seleccionadas que alivian el estómago y el intestino, ayudan a la disgestión y con la inflamación

En 1980, Maria Treben publicó el libro “Salud de la Botica del Señor” basado en sus experiencias personales. Treben padeció de tifus abdominal y recibió de parte de un extraño, un frasco lleno de un líquido de olor fuerte. Preparó compresas con el líquido y las aplicó sobre la región de su estómago, recobrando la salud. Como resultado de esta vivencia, elaboró su propia mezcla de amargos suecos y decidió ayudar al público en general. Trató por ejemplo la neumonía de una joven, ayudó a una mujer a recuperar la audición y alivió a un hombre que padecía de cáncer intestinal.

El Dr Urban Hjärne fue un seguidor de Paracelso y estableció un laboratorio en Kungsholmen donde desarolló recetas, incluida la de su Amargo Sueco que vendió a las farmacias en 1692 con el nombre de “Elexir amarum Hjaerneri ad longum vitae” (traducido como: remedio amargo de Hjärne para una larga vida). La receta era recomendada para gota, tos, parálisis, fiebre, cólicos e inflamación de las piernas.

Incluso durante la Guerra de los 30 años se recurrió a la aplicación externa de Amargos suecos, cuando el Dr. Claus Samst trató a los heridos con un elixir hecho a base de hierbas. El doctor redactó un antiguo manuscrito detallando 46 padecimientos que podían ser tratados utilizando los Amargos Suecos. Dicho manuscrito solo fue publicado después de su muerte.

En tiempos tan lejanos como en la Edad Media las personas preservaban o confitaban hierbas y las consumían para ayudar a la digestón. En el Siglo 16, Paracelso desarrolló en Salzburgo, una de sus primeras recetas de mezclas de hierbas. Durante el transcurso de su vida, publicó una gran variedad de literatura médica y fue conocido como "El Lutero de la Medicina".